Daniel 4:20-22 (23-25)

¿Qué opinión tiene usted de las advertencias y prohibiciones?
¿Cómo influyen en su vida las advertencias y prohibiciones, especialmente las de Dios?

Daniel 4:20-22 (RV 23-25)

"Y en cuanto a lo que vio el rey, un vigilante y santo que descendía del cielo y decía: Cortad el árbol y destruidlo; mas la cepa de sus raíces dejaréis en la tierra, con atadura de hierro y de bronce en la hierba del campo; y sea mojado con el rocío del cielo, y con las bestias del campo sea su parte, hasta que pasen sobre él siete tiempos;"

"esta es la interpretación, oh rey, y la sentencia del Altísimo, que ha venido sobre mi señor el rey:"

"Que te echarán de entre los hombres, y con las bestias del campo será tu morada, y con hierba del campo te apacentarán como a los bueyes, y con el rocío del cielo serás bañado; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que conozcas que el Altísimo tiene dominio en el reino de los hombres, y que lo da a quien él quiere"




En el mensaje correspondiente a Daniel 2:14-16 en este sitio, puede leer acerca de un período de tres años y medio en el cual vivimos como inmigrantes ilegales. El Señor no sólo proveyó vivienda para nosotros, sino que a través de varios hermanos latinos nos suplió también de comida, articulos de primera necesidad y servicios, como el de la lavandería.

En una ocasión en que visitábamos a unos amables hermanos chilenos que el Señor usaba para estos fines, nos pusimos a curiosear los versos de un "promesario" que ellos tenían. Para el que no esté al corriente, un "promesario" o selección de promesas, llamado a veces "pan de vida", es un equivalente cristiano de las "filacterias" judías, una pequeña caja con tarjetas que contienen versos bíblicos (con la diferencia de que la filacteria tiene unas correas para atarla al brazo o a la frente, mientras el promesario no, sino que se coloca encima de la mesa  y se lee en determinados momentos, por ejemplo antes de las comidas)

La primera tarjeta que salió fue una advertencia de castigo, que no recuerdo exactamente pero era algo así como Deuteronomio 28:15 ("Pero acontecerá, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para procurar cumplir todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán") Hicimos como Homer Simpson; "esta fue de práctica" y sacamos otra "promesa" y era también de castigo. Cuando sacamos la tercera, y salió por el mismo estilo, rompimos a reír y preguntamos a los hermanos, "¿esto es un promesario, o son puros palos?"

De modo general, recibimos con agrado los versos que nos hablan de cuánto nos ama el Señor, y de las bendiciones que recibiremos por haberlo recibido. Pero no todos recibimos con el mismo agrado las reprimendas, advertencias y llamados al orden. El sueño del rey Nabucodonosor no le fue muy divertido, porque se trataba de un castigo de siete años (aunque él no sabía quién o qué era el árbol, parece ser que se estaba barruntando que tenía algo que ver con él mismo)

Es posible que usted se esté preguntando cuál es la relación entre las promesas, las advertencias, los mandamientos y las profecías. Los "promesarios" no incluyen sólo promesas; en la mayoría de los casos incluyen las cuatro categorías - porque son un reflejo de la Palabra de Dios, y la Biblia incluye también de todo. El rey recibió de Daniel la interpretación de un sueño profético (las imágenes alegóricas de las profecías, cuando son interpretadas, son profecías tan literales como las que se pronuncian en sentido directo, así como las expresiones de glosolalia que se interpretan) Pero "profecía" es un término muy amplio. En Apocalipsis, el gran libro profético del NT donde Juan recibió tantas visiones y profecías de lo por venir, leemos:

"Escribe las cosas que has visto, y las que son, y las que han de ser después de estas"

Apocalipsis 1:19

Todos entendemos la palabra "profecía" como la proclamación de algo que ocurrirá en el futuro. Y esto no está mal, pero no es todo lo que las profecías hacen. Hay profecía acerca de las cosas pasadas - "que has visto" - donde se examinan o interpretan desde el punto de vista de Dios, y de las cosas presentes también - "las que son" - donde ocurre lo mismo. Si lee los profetas del AT desde Isaías hasta Malaquías, encontrará extensos pasajes de profecía acerca de lo que está ocurriendo en el presente y aún de cosas ya acontecidas. Generalmente Dios advierte que por estas acciones vendrán determinadas consecuencias, si no se arrepienten.

Otra cualidad de las profecías es que pueden ser absolutas o condicionadas. Los ejemplos más conocidos de profecías absolutas son los relativos al Mesías (las promesas relativas a la venida del Señor Jesucristo y lo que haría) y los relativos a la nación de Israel (como Dios los esparciría por la tierra y los llevaría en cautiverio, por causa  de sus pecados, y cómo los recogería y traería de vuelta a la tierra que Él les dio, por causa del pacto con su siervo David y con el padre Abraham)

La profecía absoluta y predictiva es una muestra del carácter invariable de Dios, que es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. La sociedad humana va cambiando, y hablamos de épocas, edades, etc. Pero Dios habita en la eternidad, y sus pensamientos, más altos que los nuestros, son los mismos por la eternidad. Cuando Balac, rey de Moab, mandó a buscar a Balaam, un profeta de no muy buena reputación, para que declarara maldiciones sobre Israel, Dios advirtió al profeta que sólo hablara lo que Él le diera. Y cada vez que abrió la boca, fue en bendiciones para los hijos de Abraham. Balac se enojó mucho, porque él estaba pagándole para que hiciera lo contrario. Y la respuesta de Balaam fue, "Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?" (Números 23:19)

La cualidad de inmutable de Dios es la garantía para nosotros de que las cosas profetizadas se cumplirán, porque Él es Santo y Perfecto, y sus decisiones, que son también santas y perfectas, no cambian. Sin embargo, se habla de "profecías condicionadas" también. Muchos han cuestionado el hecho de que Dios a veces "se ha arrepentido" y perdonado a quienes había enviado la profecía de castigo. Pero esto sólo significa que no todas las profecías son absolutas, porque ya que todo lo que sale de la boca de Dios es profecía, Él inspira lo absoluto y lo condicionado también. ¿Cuáles son estas "profecías" condicionadas?

Observe los versos de Jeremías 18:7-10:

"En un instante hablaré contra pueblos y contra reinos, para arrancar, y derribar, y destruir. Pero si esos pueblos se convirtieren de su maldad contra la cual hablé, yo me arrepentiré del mal que había pensado hacerles, ..."

"... y en un instante hablaré de la gente y del reino, para edificar y para plantar. Pero si hiciere lo malo delante de mis ojos, no oyendo mi voz, me arrepentiré del bien que había determinado hacerle"

Jeremías recibió esta revelación de Dios mismo. Ciertas profecías de castigo y destrucción estaban determinadas por causa de la maldad que predominaba en ciertos pueblos y reinos, pero si se convirtieren, Dios retiraría también el castigo y la destrucción. El caso del primer párrafo puede verse en el libro de Jonás, en que Dios no cumplió la profecía de Jonás porque los ninivitas se arrepintieron todos a una. Otras profecías de bendición y edificación serían también anuladas, por causa del pecado. Este es el motivo de la caída de los reinos de Israel y de Judá. La profecía absoluta no es ninguna "póliza de seguros" para que vivamos en pecado.

Es a las "profecías condicionadas" a las que llamamos de otro modo. Observe estos dos ejemplos:

"No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque no dará por inocente Jehová al que tomare su nombre en vano"

"Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da"

Declarar culpable (sentencia, maldición) y alargar la vida (promesa, bendición) son los resultados de cumplir o incumplir estos mandamientos de Dios (escogidos de entre los conocidos "diez mandamientos", en Éxodo 20) Las profecías condicionadas vienen asociadas generalmente a mandamientos. Un mandamiento de prohibición trae una ADVERTENCIA de castigo, y un mandamiento de acción trae una PROMESA de bendición.

En la interpretación de Daniel a este sueño profético de Nabucodonosor podemos notar advertencia, promesa y mandamiento. Los versos del comienzo (RV 23-25) tienen un carácter de advertencia que se hace claro en las palabras "hasta que conozcas..." La profecía estaba condicionada a un cambio de mentalidad del rey, un arrepentimiento.

¿Cómo influyen en su vida las advertencias y prohibiciones?


Quizás ha visto la señal anterior cuando conduce o viaja por un camino. Es una advertencia de que hay una línea férrea cruzando el camino por donde usted transita, y no hay barreras que corten la vía cuando pase el tren. Ignorarla podía ponerlo en el peligro de una colisión con un tren.


Otra señal conocida, para el que tiene aparatos eléctricos o electrónicos (a veces con las palabras "alto voltaje" incluidas) Le está avisando que no debe abrir la caja del aparato y tocar nada allí adentro - especialmente si está conectado - y que toda reparación debe ser encargada a expertos. Ignorarla puede causarle un corrientazo muy molesto y en ocasiones un accidente mortal.

Lea ahora Hebreos 11:7 :

"Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe"

Noé recibió una advertencia de Dios, y construyó su arca, proceso que duró muchos años, durante los cuales predicó al resto acerca del diluvio que se acercaba. De más está decir que ninguno se arrepintió, sino sólo Noé y sus familiares cercanos. Es notable porque el Señor Jesucristo usa este ejemplo como ilustrativo de lo que ocurrirá cuando Él venga por segunda vez. En Lucas  17:26-27 leemos:

"Como fue en los días de Noé, así también será en los días del Hijo del Hombre. Comían, bebían, se casaban y se daban en casamiento, hasta el día en que entró Noé en el arca, y vino el diluvio y los destruyó a todos"

La profecía del diluvio fue una advertencia para Noé y su familia, pero una profecía de juicio y muerte para el resto. Así la profecía de la Segunda Venida de Cristo es una de las más esperanzadoras para los creyentes, porque el Mesías restaurará la justicia en esta tierra y traerá bendición eterna sobre los suyos. Pero esta misma profecía es una advertencia de muerte para los no creyentes, porque antes de la Venida del Señor se derramarán sobre la tierra los juicios de Dios sobre ellos en un período llamado "Gran Tribulación". Quedarse en la tierra después del rapto de la iglesia - de lo cual hablaremos si el Señor lo permite - va a ser un terrible castigo que Nuestro Señor compara con el diluvio.

Si aún no ha recibido a Cristo Jesús como su Señor y Salvador, sepa que esta profecía es para todos los habitantes de la tierra. En esta tierra hay dictaduras y persecuciones, pero no son nada en comparación con las que vendrán. Hay también guerra, hambruna y epidemias, pero no son tampoco comparables con las que vendrán. El cuadro siniestro que leemos en el libro de Apocalipsis desde el capítulo 6 hasta el 19, no es una colección de alegorías; estas visiones representan eventos reales que vendrán sobre esta tierra.

Sin embargo, hay una salida para ser salvo de todo esto. Sólo tiene que doblar sus rodillas, confesar a Cristo sus pecados y pedirle perdón, y que venga a ser su Salvador y el Señor de su vida. Reciba a Cristo, y con Él la salvación y la vida eterna!

¡Que el Señor le bendiga!

En el amor de Cristo, su hermano

Israel Leonard

PS. Cristo viene pronto!

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